viernes, 18 de febrero de 2011

OMAR MENDOZA

El 12 de enero del 2011 nos despertó la amarga noticia de que nuestro amigo Omar había dejado este mundo.
Centenares de personas todavía lloramos su ausencia.
Él fue más que un líder, un verdadero padre para su pueblo. Dedicó su vida por entero a los desvalidos y a los enfermos. Luchó hasta el último aliento por el bienestar y la igualdad de derechos de la comunidad mocoví, a la vez que apoyó incansablemente las batallas en pos de igualdad y justicia de comunidades aborígenes de todo el país.
Fue un amigo leal. Un espíritu inquebrantable templado en las contrariedades de una raza que sufre desde generaciones. Un ser humano dotado del poder de conmovernos y transformarnos con su amor incondicional, humildad, generosidad.

Patrice A. Blanco





OMAR MENDOZA

Quienes tuvimos el inmenso orgullo de ser honrados con tu amistad; quienes conocimos tus sueños y nos estremecimos con tus dolores, llevaremos por siempre tu recuerdo grabado en el corazón y haremos rodar tu nombre y tu historia por los labios de nuestros hijos y nuestros nietos, para que tu ejemplo se propague por el mundo a través de los tiempos.
Tu voz habitada de Dios nos pronunció HERMANOS, nos convirtió en una sola familia. Todos los criollos, todos los aborígenes que atesoramos tu cariño y tu recuerdo, hoy fundamos una nueva raza en la que permaneceremos unidos con los lazos de AMOR, RESPETO y FORTALEZA que nos enseñaste, para prolongar tu lucha y tus anhelos.